Plantar un árbol, tener un hijo y… ¿escribir un libro? En tiempos de pandemia nos hemos dedicado por completo a nuestras creatividades más ocultas. Si uno de tus “sueños frustrados” siempre ha sido escribir un libro, en Palgraphic te vamos a dar las principales claves para que, por lo menos, te animes a comenzarlo.
Para escribir el libro de tus sueños hoy en día no necesitas mucho más que un ordenador, dejar volar tu imaginación y dedicarle tiempo. Sin embargo, todos nos hemos encontrado con el síndrome de la hoja en blanco alguna vez, incluso los escritores más afamados confiesan haber sentido ese abismo en algún momento. Para poder lidiar con tu concentración de forma productiva y, a la vez, cumplir tu sueño, vamos a ofrecerte los pasos a seguir más útiles a la hora de comenzar a narrar una historia.
1. ¿Cómo comenzar?
En muchas ocasiones, partimos de una idea bastante clara, sabemos cuáles son nuestros personajes y conocemos cómo va a ser su destino. Pero ¿cómo comenzamos? Empezar una historia no se limita al primer capítulo, sino que antes de comenzar a escribir debemos tener claro cuáles son los antecedentes, de dónde vienen los personajes.
Partir de una idea es imprescindible, pero necesitamos conocerla en profundidad para saber cómo vamos a seguir. Además, conociendo lo que ha pasado antes, es más simple comprender lo que ocurre a lo largo de la historia. A partir de los antecedentes, toda la historia cobrará sentido en tu cabeza.
Párate y dedícale tiempo a pensar qué hacían tus personajes antes de comenzar la historia, cómo eran y cómo vivían.
2. ¿Cómo mantener la atención?
Una vez hemos conseguido captar la atención de los lectores, es imprescindible mantenerla. Para ello, nos vamos a enfocar en los siguientes aspectos:
- Lenguaje en tercera persona: para comenzar desecha el lenguaje en primera persona ya que es limitante y no permite ofrecerle al lector la visión de lo que piensan o les ocurre a terceros.
- Vocabulario: busca sinónimos, lee más para ampliar tu léxico y utiliza variedad de palabras en tu texto. De este modo, conseguimos crear un ritmo asequible de lectura.
- Ahorrar en el lenguaje: utilizar demasiadas expresiones ayuda al escritor a organizar sus pensamientos, sin embargo, el lector no tiene por qué percibir lo mismo; para ello, ahorrar en el lenguaje es esencial. A menudo, las cosas más atractivas son las más sencillas.
- Base: es imprescindible partir de un hilo conductor en función de la temática a tratar, los cimientos de tu historia deben estar claros para transmitirlos correctamente. Aunque entres en otras tramas o la historia se desvíe, no olvides volver siempre al hilo conductor de tu narración; por el que tu lector te está leyendo.
3. ¿Cómo lo cierro?
Al comenzar la publicación, el entusiasmo y la idea de plasmar una historia invaden nuestra forma de escribir. Lo principal a la hora de avanzar es evitar dejarnos llevar por estos sentimientos y perder el hilo de la historia inicial. Para ello, es imprescindible contar con un plan esquemático previo a la escritura, que sirva como guía y nos impida entrar en un bucle y no finalizar nuestra historia.
En ocasiones está bien improvisar, nos da la posibilidad de ir más allá y conocer nuevos caminos, sin embargo, la mejor improvisación es la que está preparada. Sigue el plan que hayas creado y así conseguirás centrarte en la historia inicial, aunque realices modificaciones. De esta forma, conseguirás organizar tu mente y enfocarte en el desarrollo coherente de la historia.
Si eres de esas personas a las que siempre les ha picado el gusanillo de escribir un libro, no dejes de intentarlo y perseguir tus sueños. Hoy en día no hace falta ser un autor internacional o contar con una gran editorial que te respalde, sino que puedes autoeditarte tú mismo en una imprenta editorial. Y recuerda, Stephen King tiró durante años sus libros a la basura antes de que se publicara el primero pensando que su trabajo no era bueno, Agatha Christie pasó cuatro años suplicando a editoriales que publicaran alguna de sus obras y J. K. Rowling y su personaje de Harry Potter recibieron doce negativas antes de la primera publicación. ¡No desistas y persigue tu sueño!